¿HOMBRE, MUJER, LGTBI?
Ahora que tanto se habla de la identidad de género, el día del Orgullo Gay, la protesta de Ciudadanos... puede ser un buen momento para valorar lo que está ocurriendo desde la óptica de Mindfulness –del que por cierto, se habla mucho menos-.
Mindfulness aporta al menos dos conceptos: etiquetas y no juicio.
Las etiquetas son el cartel que pegamos al cuerpo de una persona al nacer, en este caso hombre o mujer (XY, XX según el código genético) y que luego se refleja en su Acta de nacimiento. O sea, llegamos al mundo y nos etiquetan.
A continuación, nuestros actos van a ser juzgados desde esa etiqueta: si es la de hombre y nos vestimos con ropas de mujer –que esa es otra, el negocio de la moda- o nos comportamos con dulzura o sensibilidad –atributos femeninos- , seremos gays, a pesar de que sexualmente sintamos atracción por las mujeres; o en los casos más tenues, afeminados.
¿Qué podemos hacer para cambiar todo esto? –o al menos intentarlo-
OBSERVAR DESDE EL NO JUICIO
Observar nuestra manera de etiquetar, nuestras propias etiquetas, y las etiquetas que la sociedad impone. Y siempre observar desde el no juicio, o sea, disponer la mente para acompasarla con el momento presente, para que no salte de rama en rama como un mono, aquietarla y ponerla a nuestro servicio intelectual sin dejarnos llevar por toda la elaboración conceptual y de cadenas de juicios que nuestra mente es capaz de hacer en unos segundos. Observar al otro y sentirlo sin necesidad de reconocerlo como hombre o mujer, sino como ser humano al que dedicarle nuestra presencia.
“Se te va la olla. ¿Lo sabías?
– Llevo toda una vida practicando.”
Película "El guerrero pacífico"